POEMA SIETE.
REPRENDIDO HIJO MIO.
Si menospreciareis
toda reprensión mía.
Entonces
comerás del fruto de tu camino Y te saciarás de tus propios consejos.
Bien sabeis, que el descarrío
Cegará a los ingenuos, y matará a los insulsos e impíos
Estando a que la dejadez perderá a los necios por su vacío.
Pero dijo
Yavé, que el que lo escuche
Habitará confiadamente
en su llamado Y habitará tranquilo en su morada, sin temor del mal.
Si aceptas Hijo mío, mis palabras certeras
Y dentro de ti, atesoras mis decretos Arropa a temprana hora a la sabiduría.
Inclina tu
corazón al entendimiento,
Que la inteligencia muchas veces se equivoca Cuando la razón llama a gritos, que ha pecado.
Carlos Fidel
BORJAS DIAZ……..
DERECHOS
RESERVADOS
Lima
27FEB2012.
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